¿Que es la periositis?
La periositis, también conocida como síndrome de estrés medial de la tibia o sin splints, es una condición caracterizada por la inflamación de los tejidos que rodean el hueso de la tibia, específicamente el periostio, que es la capa externa del hueso.
Causas
El mecanismo de lesión de la periositis generalmente está relacionado con el estrés repetitivo y excesivo en la tibia, lo que provoca una respuesta inflamatoria en los tejidos circundantes. Algunos factores que contribuyen a la aparición de la periositis incluyen:
· Actividades repetitivas de alto impacto: Correr o saltar sobre superficies duras y rígidas, especialmente en terrenos inclinados o irregulares, puede generar estrés excesivo en la tibia y desencadenar la periositis.
· Aumento brusco de la intensidad o duración del ejercicio: Incrementar repentinamente la carga de entrenamiento sin permitir que el cuerpo se adapte gradualmente puede sobrecargar los tejidos de la tibia y desencadenar la inflamación.
· Técnica incorrecta: Una técnica de carrera deficiente, como una pisada incorrecta o un mal alineamiento corporal, puede aumentar la carga y el estrés en la tibia, contribuyendo a la periositis.
· Calzado inadecuado: Utilizar zapatos deportivos que no brinden el soporte adecuado, amortiguación o estabilidad puede aumentar el estrés en la tibia y aumentar el riesgo de periositis.
· Factores anatómicos y biomecánicos: Algunas personas pueden tener una predisposición genética o características anatómicas que afectan la distribución de la carga en la tibia, lo que aumenta el riesgo de periositis.
Recuperación
Para recuperarte de la periositis, es importante seguir algunos pasos clave. Aquí hay algunas recomendaciones para ayudarte en el proceso de recuperación:
· Cambios en la actividad física: Es importante identificar y corregir los factores que contribuyeron a la periositis. Esto puede incluir ajustar la técnica de carrera, cambiar el calzado deportivo, evitar superficies duras o disminuir la intensidad y duración del ejercicio.
· Descanso: Es fundamental permitir que los tejidos inflamados se recuperen. Esto implica reducir o evitar actividades que agraven el dolor, como correr o saltar. Descansa lo suficiente para permitir que la inflamación disminuya y los tejidos se reparen.
· Indiba, neuromodulación, magnetoterapia y un trabajo de fuerza adaptada.
· Aplicación de frío: Aplica hielo o compresas frías en la zona afectada para reducir la inflamación y aliviar el dolor. Puedes hacerlo durante 15-20 minutos varias veces al día. Asegúrate de envolver el hielo en una toalla para evitar quemaduras en la piel.
· Medicación: En la fase aguda los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como el ibuprofeno o el naproxeno, pueden ayudar a reducir el dolor y la inflamación. Sin embargo, consulta con tu médico antes de tomar cualquier medicamento, ya que pueden tener efectos secundarios y no son adecuados para todas las personas.
En resumen, la periositis se produce debido a la combinación de estrés repetitivo y excesivo en la tibia, junto con otros factores contribuyentes. El mecanismo de lesión involucra la inflamación de los tejidos que rodean el hueso, lo que resulta en dolor, sensibilidad y posiblemente la formación de pequeñas fracturas por estrés. Es importante abordar adecuadamente esta condición para prevenir complicaciones y permitir una recuperación completa