¿Sufres de una tendinopatía y tu recuperación se está complicando?
Primero tenemos que entender porque se te ha producido la lesión. Normalmente se trata de algún factor que has cambiado en tu entrenamiento o en tu día a día.
Las tendinopatías más frecuentes que vemos son las del tendón de Aquiles y el tendón rotuliano. Estas tendinopatías se ocasionan por una sobrecarga y una disfunción de carga del tendón durante el ejercicio. Mas frecuentemente se provocan con actividades donde hay impacto como en el running, voleibol o baloncesto entre otros… Otros factores importantes que causan la tendinopatía son una degeneración del tendón, desorganización del colágeno y otros factores i como el sobrepeso.
Para una buena recuperación tenemos que entender bien la función del tendón . Las funciones principales son absorber la energía y trasmitirla durante el movimiento. Por eso en la planificación de la recuperación de una tendinopatía tenemos que trabajar la fuerza pero también los determinantes de velocidad y pliometría.
Otros factores que son importantes de tener en cuenta son:
- Donde se presenta la lesión, si es insercional o en otra zona del tendón.
- Cuando se presenta el dolor
- En que fase esta la tendinopatía? si es reactiva o hay degeneración
- Qué estado físico nos encontramos al paciente.
En FARR los tres determinantes que utilizamos para la recuperación de una tendinopatía son el volumen, la frecuencia y la intensidad.
La intensidad
La intensidad del ejercicio físico es la mayor causa que crea problemas. Cuando hablamos de intensidades nos referimos a series, velocidad, saltos, cambios de direcciones, entrenar con desnivel. Para una buena recuperación la intensidad es lo primero lo que adaptamos/ eliminamos.
Frecuencia
La frecuencia son las veces que repites la actividad física. El tiempo de recuperación entre los entrenamientos es importante para la recuperación del tendón. En vez de entrenar 4 a 5 veces por semana reducimos a 2 a 3 veces para tener por lo menos 48h entre sesiones. A veces necesitamos mas tiempo esto depende del paciente y nos adaptamos en función de sus necesidades.
El volumen
El volumen es la distancia que haces o el total en tiempo de un entrenamiento. El volumen es el determinante que menos afecta siempre y cuando ya hayamos adaptado bien los otros dos determinantes. Es decir, si eres corredor y saliste a trotar y el dolor empezó a partir del km 8 , sabemos que esta es tu referencia. La próxima vez cuando salgas a correr iremos hasta 7km y controlaremos las otras cargas y adaptando el tendón con ejercicios adicionales para su fortalecimiento.
El tratamiento principal en la fase aguda es disminuir el dolor. La literatura nos ha enseñado que para disminuir el dolor los ejercicios isométricos van muy bien. Los más indicados son 5 series de 30 repeticiones durante 60 segundos con una carga máxima de 70% de peso corporal.
Durante la recuperación de una tendinopatía podemos tolerar un dolor leve, es decir en una escala de 0 a 10 sería un 2-3. Para entrenar las fibras del tendón y la recuperación del colágeno el ejercicio físico el lo mejor indicado.
En concreto la base de la recuperación de una tendinopatía es el ejercicio físico controlando las cargas con el volumen, la frecuencia e intensidad.